Buenas, ¿cómo vamos con este confinamiento? Para haceros más amena la espera hasta que podamos salir, aquí os dejo la reseña de la cuarta historia de la serie "Los Cordina" que encontré hace poco y decidí leer, para conocer como seguía este familia real tan especial.
A continuación os dejo la sinopsis de la misma y mi valoración personal.
Durante algunas maravillosas semanas, Su Alteza Real Camila de Cordina tendrá la posibilidad de ser simplemente Camila MacGee. Trabajar para Delaney Caine en los bosques de Vermont le ofrecía la oportunidad perfecta de huir de la prensa. Pero a medida que la rabia que le provocaba el mal genio del arqueólogo se fue convirtiendo en fascinación y deseo, la princesa tuvo que admitir que estaba llegando el momento de descubrir su verdadera identidad. Del nunca había necesitado a nadie en toda su vida, por eso había aceptado a regañadientes la presencia de Camila. Pero pronto la insinuante belleza de aquella mujer se fue haciendo un lugar en la autosuficiente vida de Del y se vio obligado a reconocer que llenaba un vacío que ni siquiera sabía que existía. El problema era que lo que sí sabía era que Camila ocultaba algo.
En esta ocasión, la autora nos traslada a dos mundos totalmente opuestos, la belleza y protocolo de la realeza, así como sus problemas; y los maravillosos bosques de Vermont, así como la tranquilidad de los mismos.
En esta historia, la autora, sabe mezclar perfectamente, ambos mundos, ya que uno no tiene que eclipsar al otro, sino que se complementan perfectamente.
También nos muestra como es el día a día de la realeza, y nos hace pensar, que aunque parezca que no hacen nada y que no tienen sentimientos ni temores, son personas como otras cualquiera, y se agobian y necesitan respirar, para poder seguir adelante con su día a día, y de vez en cuando necesitan unas vacaciones y desconectar de su mundo, aunque parezca idílico.
Nos describe a dos personajes fuertes e independientes, unidos a su familia, que no necesitan a nadie para solucionar sus problemas, ya que ellos solos pueden. Pero, que a su vez son vulnerables, por ejemplo Camila con su miedo a romperse delante de la prensa por la presión mediática, y en el caso de Del, por un accidente que lo deja lesionado y no puede trabajar lo rápido que desea ni ir a su descubrimiento arqueológico y descubrir nuevos hallazgos. Ambos se ayudarán mutuamente a la vez que luchan contra los sentimientos que surgen entre ellos, y lo que no saben es que tienen más cosas en común de las que creen, y por no decir la verdad puede que pierdan lo mejor que les puede pasar en la vida.
Camila gracias a Del descubre algo que llevaba tiempo sin sentir, motivación por algo en la vida, y eso es gracias a que lo ayuda en su trabajo, lo que la hace quedar fascinada y decidida a dedicarse en cuerpo y alma a conocer más sobre lo que está aprendiendo.
Si os gusta este género de lectura, o si solo queréis probar algo nuevo para distraeros ahora que no podemos salir de casa, este es vuestro libro, pero os recomiendo que leáis los tres anteriores, ya que así podréis seguir la pista de esta familia real tan especial, a la vez que conocéis todo lo que se puede cocer tras esa apariencia de normalidad que suelen mostrar.
Os hará pasar un buen rato, y os olvidareis durante el tiempo de lectura de estos malos momentos en los que nos toca vivir, os sacará de la rutina diaria, y ya que no podemos viajar por este maldito coronavirus, lo haréis pero sin salir de vuestras casas, iréis a Cordina, una pequeña y bella isla en medio del Mediterráneo, y a Estados Unidos, a un pueblos pequeño rodeado de naturaleza, que hará sentir a Camila como en casa, aún sin conocerla de nada.
Leedlo porque no os vais a arrepentir, ya que desde el minuto uno, que lo cojáis en vuestras manos y empecéis a leerlo ya no vais a poder soltarlo hasta conocer el final, porque os atrapa y engancha, y cualquiera de los cuatro libros (los otros tres hace tiempo de subí la reseña), os meten dentro de la historia y la vais viviendo según lo hacen los protagonistas.
Gracias por vuestra atención, y recodad que un día sin leer es un día perdido, y más en estos tiempos que corren.
Ánimo a todos y pensad que ya pasó un día más para estar encerrados y, que ya queda un día menos para poder salir a la calle, respirar aire puro, poder ver a nuestras familias, con las que no convivimos, y que todos juntos podemos vencer esta situación.
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