Buenas, ¿cómo estáis? Para alegraros un poco más estas mini vacaciones, os vengo a dejar a reseña de la octava y última novela que compone la serie "Escándalos en palacio". Como en las anteriores, la autora es diferente, pero para mi eso le da un punto extra a la novela, porque no sabes por donde va a ir la historia, aunque la trama común sea la misma. Desde ya, os pido disculpas por subirla sin portada, pero es que no encontré ninguna que me agradara.
A continuación, y como siempre, os dejo la sinopsis de la novela y la valoración.
¡Que paren las rotativas! El cuento de hadas de Allegra Jackson y el príncipe Alessandro Santina, ¿Realidad o ficción? Parece un sueño: enamorarse de un príncipe y vivir en carne propia el "y fueron felices y comieron perdices". La familia de Allegra no ha preparado a la joven para una pública entregada al deber, y el atractivísimo príncipe Alessandro siempre se ha mostrado alérgico a sentar la cabeza. A pesar de las mujeres tan espectaculares con las que se le ha relacionado en varias ocasiones, el heredero al trono ha escogido a la vulgar Allegra y su infernal familia. ¿Es todo tan real como parece en el compromiso más mediático del año?
Como en las anteriores entregas de esta serie de libros, la autora, gracias a sus descripciones, tanto de los lugares en donde transcurre la trama, como de las personas que en ellos viven, ya sean realeza o simples plebeyos, nos hace conocerlos un poco mejor, sin necesidad de salir de casa ni de coger un avión, solo con la imaginación, y eso hace que quieras conocerlos de verdad, porque es una manera de que te enganches a la lectura.
Muestra a dos personajes totalmente distintos, como ya venía sucediendo, pero con algo en común, sus pasados y la forma en que sus familias los asfixian, para que hagan aquello para lo que les prepararon, aunque ellos no estén muy por la labor de momento, por eso llegarán a un trato que ellos creen que es beneficioso para ambos, pero que a lo mejor les explota en la cara.
Ambos luchan contra lo que sienten por el otro, porque, a decir verdad, no tienen muy buenos ejemplos en ese ámbito, ya que desde pequeños tuvieron una imagen muy distorsionada de las relaciones de pareja, y eso los marcó bastante, y es algo que no controlan. Pero lo que les hará darse cuenta de que quieren ser felices, es cuando descubren que apoyarse en otra persona no es sinónimo de debilidad, sino todo lo contrario, y que si quieren ser felices van a tener que dejar todos sus miedos atrás y luchar por aquello que merece la pena.
Son independientes, fuertes, seguros de si mismos, pero a la vez vulnerables, y que se les puede hacer daño sin querer muy fácilmente.
Ellas no son las típicas mujercitas en apuros, sino que son personas que buscan a un compañero, un igual, no el típico príncipe azul que les saque las castañas del fuego. Quieren a alguien que las apoye en los momentos difíciles, pero que les deje su espacio, para poder ser ellas mismas.
También describe como es la relación de ellos con sus familias, y como interactúan ambas entre sí, y la verdad, seas del estatus social que seas, en todos lados cuecen habas, y son familias normales, aunque son sus peculiaridades.
Es una buena forma de pasar esta Semana Santa, o si no tenéis vacaciones, de desconectar de los problemas y la rutina diarios, porque al ser una novela tan entretenida que te engancha de principio a fin ya no vas a querer parar de leer, y más si es algo que nos hace olvidarnos de lo malo, y eso es de agradecer.
Si os gusta este género literario, o simplemente queréis conocer nuevas autoras, esta es vuestra saga, porque desde que la coges en tus manos ya no vas a querer parar de leer hasta conocer su desenlace, porque al ser tan entretenida te engancha.
Os recomiendo que las leáis por orden, porque al ser tantas, con tantos personajes, y las historias estar conectadas, sino os podéis hacer un lío.
Gracias por vuestra atención, y recordad que un día sin leer es un día perdido.
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