Buenas. ¿Cómo estáis llevando la entrada del otoño, este inicio de una nueva estación".
Ahora, que parece que tengo un poco más de tiempo, que no estoy tan ocupada, os vengo a dejar la reseña de la segunda novela que compone la trilogía "La maldición de las siete novias", en donde la autora nos sigue mostrando como es la vida en una casa llena de fantasmas, y como une persona puede llegar a acostumbrarse a los hechos más inverosímiles que le puedan suceder.
Os dejo la sinopsis de la novela, como siempre, y la valoración.
Siete novias muertas, una mansión hechizada llena de fantasmas y una maldición de dos siglos.
La primera vez que Sonya y su primo Owen traspasan el espejo aparecen en el convite de la boda de Lisbeth Poole el 1916. Saben que la van a ver morir, y aunque intentan impedirlo, no pueden cambiar el pasado.
Clover, la abuela de Sonya, le comunica con la música que hace sonar en la casa que presenciar la muerte de loas siete novias la convierte en testigo. De este modo ellas no serán olvidadas, podrá recuperar los anillos de boda que Dobbs robó, acabar con la maldición y expulsar su espíritu de la casa.
Esta autora en esta novela nos mete dentro de un universo en donde predomina la tensión, un misterio cuidadosamente tramado, personajes cautivadores y un final llenos de suspense que te dejará con ganas de más, y desenado que llegue el desenlace final de la historia.
Desde el principio nos mete dentro de la historia, y la vamos viviendo a la vez que los personajes, y eso es gracias, tanto a las descripciones de las personas, los lugares y los hechos que les llevaron a ser lo que hoy en día son, ya sean fantasmas o personas vivas, pero algo tienen el común, una casa solariega de la que todos están enamorados y en la que viven.
Nos muestra a una protagonista fuerte, que no depende de nadie para ser feliz, que no necesita a ningún hombre para que la rescate, solo quiere a un igual, a alguien que la apoye en los perores momentos, y le de un empujón cuando crea que está a tascada. No es una damisela en apuros, no obstante vive en una casa llena de fantasmas, que son familia, casi todos, pero en donde hay uno que le quiere hacer daño.
Tiene que aprender a entender lo que los que están en el más allá le quieren transmitir, ya que ella es la única que puede romper la maldición que los tiene a todos atrapados en una casa.
Desde el principio este libro, como ya hizo su antecesor, te engancha desde el primer momento que lo coges en tus manos, ya que te traslada a los lugares en donde transcurre la historia sin necesidad de coger ningún medio de transporte solo con tu imaginación, y eso hace que quieras seguir y seguir leyendo hasta conocer su desenlace.
Es una buena forma de desconectar de los problemas y la rutina diarios, porque no hay casi nada mejor que llegar a casa y que un buen libro te esté esperando, y más ahora que va a empezar el mal tiempo, y los días cada vez son más cortos.
Si os gusta este género literario, o queréis conocer nuevas lecturas, este es vuestro libro, porque desde ya os digo que si lo leéis no os vais a arrepentir de haberlo hecho, porque este autora mezcla como nadie suspense, amor, intriga, algo de terror, etc., y eso hace que el libro sea aún más trepidante.
Gracias por vuestra atención y recordad que un día sin leer es un día perdido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario