Con veinte Nora cree en el amor para toda la vida y se casa con Giorgio con la idea de que haberlo encontrado. Veinte años después, ese supuesto amor la deja por una mujer más joven y de pronto Nora se encuentra vieja, gorda, con hijos, desfasada y sin trabajo. Cree que su vida ha terminado pero el destino le tiene preparadas muchas sorpresas.
Es la típica historia de amor, pero en vez de ser entre dos jóvenes, es entre dos personas de mediana edad. Nora ya no cree en el amor, pero una persona le hará pensar diferente, a la vez que cosas que pasan le harán replantearse su vida.
Como siempre Megan Maxwell nos sorprende, ya que en vez de darnos ese amor de juventud que parece que todo lo puede, nos da un amor real, es decir, entre dos personas que ya son adultos maduros, que tuvieron que luchar en la vida, y que gracias a ellos mismos y a sus seres queridos siguieron adelante a pesar de las trabas que les puso la vida.
Os lo recomiendo, porque la evolución de Nora es espectacular, ya no necesita un príncipe azul en su vida para ser feliz, con ella, sus hijos, su familia y sus amigos se basta y se sobra. Pero hay alguien que le hará cambiar de parecer y le dará un plus a su vida.
Megan Maxwell, es sus novelas nos da mujeres fuertes, que no necesitan a príncipes para ser felices, que son independientes, fuertes, pero que a la vez son unas románticas empedernidas, por eso, si os gusta esta autora, las novelas de amor puras y duras, este es vuestro libro. Leedlo que no os arrepentiréis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario