Os vengo a recomendar este libro autobiográfico de Isabel Allende.
Me encantó, aunque es muy triste. En el Allende cuenta que quiso escribirlo para que su hija Paula supiera la historia de su vida cuando despertara del coma en que la había sumido la porfiria. También muestra como se sintió toda la familia cuando el marido de Paula los llamara para comunicarles la noticia.
Este libro narra la historia de su vida, desde que nace hasta que muere su hija Paula. Nos cuenta quienes fueron o son las personas más importantes de su vida y los recuerdos que en ella quedaron de ellos. También narra hechos dramáticos que dejaron cicatrices profundas en su alma. Y, por último, nos muestra la unión de una familia que a pesar de la adversidad no se dejan solos ni un minuto y nunca se abandonan a pesar de que tengan otras cosas que hacer.
En mi opinión hubo un antes y un después, en la forma de escribir de Allende, y en este libro se refleja, ya que creo que el punto de inflexión se encuentra en el fallecimiento de Paula. Se muestra triste, melancólica a la hora de escribir, y aunque es un tributo a su hija, eso no ayuda a paliar el dolor.
Lloré como nunca llorara con un libro, porque ver ese sufrimiento y que nadie pudiera hacer nada encoge el corazón de cualquiera, sobre todo el dolor del marido de Paula, ya que llevaban muy poco tiempo casados cuando esto sucedió, y como nunca perdió la esperanza de que ella iba a despertarse y a ponerse bien, y que podrían realizar juntos los sueños que tenían.
Os lo recomiendo para leer, porque no os defraudará. Si a mí me gustó, que no me van mucho las biografías, a vosotros también.
Leedlo que no os vais a arrepentir. Yo no lo hago.
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